Capítulo 46 ¿ÚLTIMO CAPÍTULO?

Mi padre murió hace algo más de diez años.

Perdonad que empiece así, pero es que las típicas disculpas por no escribir durante tanto tiempo y todo eso, se me hace ya muy pesado. Aunque este párrafo en sí no es más que eso, una disculpa.

Mi padre murió hace algo más de diez años. Que me perdonen mi madre y mis hermanos si no concreto la fecha, pero es que incluso para esto, nunca he sido muy bueno con los días y eso.

¿Qué por qué os cuento esto? Bueno este es el punto donde mi vida empezó a cambiar radicalmente hasta llevarme donde estoy hoy día.

No mucho antes de la muerte de mi padre (tampoco voy a ir mucho más atrás porque esa sería otra historia), mi vida prácticamente se centraba en el trabajo. Me ofrecieron un puesto de encargado en una joyería lo cual sonaba muy atractivo y lo fue. Poco a poco se fue convirtiendo en una época de plenitud económica. Las cosas marchaban muy bien y me tomé tan en serio el nuevo puesto, que conseguí resultados muy favorables. Al año más o menos, mi jefe me ofreció el puesto de comercial mayorista de joyería, lo que se conoce como viajante y acepté. Esto fue un gran salto pues me brindó una estabilidad hasta entonces inimaginable y unos ingresos que para mi eran desorbitados. En fin, sin enrollarme mucho yo vivía para trabajar. Y aunque en lo económico no me iba nada mal, lo emocional se fue deteriorando poco a poco. Y aquí, en este tiempo, es donde entró en juego la muerte de mi padre.

Mi padre, pese a todos sus defectos, que eran muchos, era una persona que trabajó duro toda su vida. Su padre, mi abuelo, murió cuando el tenía tan solo nueve años y el sacó adelante a toda su familia. Su sueño en los últimos años era tener una casita en el campo con un terrenito para compartir con su familia. Y lo logró incluso antes de yo empezar en la joyería. Lo compró junto a mi madre y poco a poco fueron dándole forma hasta convertirlo en lo que es hoy. Una buena casa, con una buena piscina y un trozo de tierra para sembrar. Pero, ¿qué pasó? Por la fecha en que se compró ese terreno, le detectaron un cáncer y justo cuando su sueño estaba tomando forma, se murió.

Yo aun estaba en la joyería cuando esto pasó y sin darme cuenta me fui transformando. El dinero  que entraba en casa, la forma de vida que llevaba, dedicando al trabajo más horas de las que tenía el día y los demás problemas  que me acontecían en aquel entonces más ahora esto, me hicieron ir cambiando hasta prometerme que a mi, no me pasaría lo mismo que a él. Y entonces empecé poco a poco a pensar menos en el trabajo y más en disfrutar de la vida.

Esto no es malo, pero a mi se me fue de las manos. Todo era ganar y gastar vivir bien y aplicar la ley del mínimo esfuerzo en todos los sentidos. Esto hizo que poco a poco mi vida fuera cambiando en una dirección que tarde o temprano se iba a frenar.

Me quedé solo. Me mudé de ciudad y encontré más amigos y seguía disfrutando de la vida al máximo. Pero algo estaba pasando en mi interior y sin darme cuenta, cada día que pasaba, algo en mí, se quedaba vacío.

Llevaba una buena vida, hacía lo que quería y gastaba más de lo que podía. Todo era disfrute. Hasta que llegó un momento en el que mi forma de vida empezó a perder sentido. Ya no encontraba nada que me llenara. Que llenara esos vacíos que iba acumulando en mi interior. Llegado un momento crítico, exploté.

Como mi vida ya no me satisfacía decidí que tenía que cambiarla (OTRA VEZ MÁS). ¿Pero cómo? A mis treinta y pico de años ya había dado tantas vueltas y había empezado tantas veces desde cero que ya no sabía para donde tirar. Y me llegó la inspiración.

Tras un cúmulo de ideas que me brotaban de corazón y cabeza, decidí de verdad cambiar radicalmente de vida. Y por casualidad, surgió la oportunidad de venirme a Honduras.

No os confundáis, no soy ningún santo, más bien todo lo contrario. No vine a Honduras a cambiar nada, ni a hacer el bien, ni ayudar a los demás, ni nada por el estilo. Vine simple y llanamente, a buscarme la vida.

Bueno el resto ya lo sabéis, es lo que os he venido contando en este blog durante estos casi seis años ya.

Mi vida fue encontrando de nuevo la paz que ansiaba desde hacía largo tiempo y los vacíos de mi interior se fueron llenando hasta rebosar. ¿Y cómo? ¿Quién lo iba a decir? Entregándome a los demás. Haciendo todo lo que estuviera en mi mano para ayudar a personas que no tenían nada. Descubrí una nueva vida que se me estaba ocultando o que mejor dicho, no quería ver.

No todo ha sido de color de rosa. Como ya sabéis he tenido muchos altibajos y no siempre me he sentido bien y pleno. He cometido muchos errores pero también he aprendido de ellos.

Al grano. Este año ha sido muy duro para mí. Sabéis que siempre hemos estado muy escasos de fondos pero ya el año pasado la cosa era insostenible.

Decidí buscar una alternativa en el Iher, ya sabéis la institución a la que pertenece nuestro centro educativo. Y Sor Marta, su fundadora, me abrió las puertas y me ofreció trabajo. Lo cual ha sido toda una bendición, pues no se como hubiera hecho para pasar todo este año. Si no fuera por su ayuda, la ayuda de Santi y por supuesto, la ayuda de mi FAMILIA con mi buena madre a la cabeza que siempre ha estado ahí, no se si hubiera podido seguir haciendo lo que hago.

Aun así mi situación ha sido precaria pues los fondos no llegaban para sostenernos a Dania, mi novia y a mí y hemos pasado alguna que otra calamidad. El caso es que entre el trabajo, los ánimos y los demás problemas que hemos tenido, me sumí en una, ¿cómo llamarlo?, en una etapa de introversión, podría ser, que no me dejaba acercar mis manos al teclado.

Ahora he tomado otra decisión importante en mi vida. Debo comenzar a abrirme camino  en el mundo laboral hondureño, ya que como os he dicho, los fondos no llegan. Mi preocupación siempre había sido que si trabajaba, tendría que dejar el centro educativo y dejar de ayudar como lo hacía hasta ahora. Y en parte así ha sido y así será. Pero solo en parte.

He descubierto en todos estos años que todo tiene “truco” en la vida, incluso la vida misma lo tiene. Yo he descubierto el “truco” que tiene la mía o al menos en parte, ya que sigo descubriendo cada día. Y no es tener mucho o poco, o entregarse mucho o poco. Para mi el equilibrio está en ganar lo justo para “vivir lo justo” y el resto de tiempo y de ganancias, entregarlo a los demás que no pueden, para que vivan también “lo justo”.

Y eso es lo que vengo haciendo y lo que seguiré haciendo a partir de ahora. No se ¿dónde? va a desembocar esta aventura. No se si terminaré dejando definitivamente el centro y empezaré de nuevo una nueva vida. La verdad es que el trabajo que hago aunque es agotador, es tan gratificante que las fuerzas siguen estando ahí siempre. Al menos por ahora.

Ahora Dania también ha encontrado trabajo y esto puede ser una salida para que con el esfuerzo de ambos, podamos levantar cabeza y seguir adelante con lo que hacemos. De momento todo seguirá más o menos igual, aunque como os he dicho voy a empezar a indagar como puedo ganarme la vida un poco mejor de lo que lo hago ahora. Será difícil ya que tengo que compaginar lo que hago con el trabajo.

No se el ¿dónde?, ni el ¿cuándo?, ni el ¿cómo? Va a terminar todo esto. Lo único que sé, es que no voy a renunciar, a seguir BUSCANDO MI SUEÑO. Y siempre que Dios, en el que creo firmemente a pesar de todos los problemas que hemos tenido en nuestra relación, me siga dando las fuerzas necesarias, SEGUIRÉ ADELANTE.

Como siempre y aunque algunos de vosotros quizás hayáis dejado de creerlo, FAMILIA, os recuerdo que OS QUIERO Y NO OS OLVIDO.

P.D.: ¿MI ÚLTIMO BLOG? No lo creo. A saber.

 

Mi perlita:

El silencio de mi pasado duerme mi alma

y sigo luchando por encender la llama, que me traiga la calma.

Calma que busco con ansias, ansias que nublan mi karma.

 

El anhelo de mis recuerdos, refugio de mi voz cansada.

Cansada de tanto caminar, por sendas apagadas.

Quiero gritar al silencio, pero no salen mis palabras.

Quiero parar el viento, que agita y nubla mi mirada.

Quiero apagar el fuego, en el que arden mis viejas armas.

Quiero sembrar mi valle y regarlo con mis lágrimas.

Quiero que nazca en esa tierra, un atisbo de esperanza.

Quiero perderme en el tiempo y esperar allá la llegada.

La llegada de un reflejo, que renueve mi templanza.

Publicado en Sin categoría | 3 comentarios

Capítulo 45. El Regreso. Publicado18/02/2014 a las 12:12 pm

Imagen 013

 

Queridos amigos y familia.

Me vais a perdonar, pero hasta ahorita no he tenido un momento para sentarme tranquilo a repasar todas las vivencias de estas últimas vacaciones. Bueno, hecha la reflexión ahí va:

La verdad es que como sabéis, cuando recibí la noticia de que mi madre y mi hermano ya no venían me llevé una gran decepción y no fui yo sólo. Muchos vecinos, amigos y alumnos también se la llevaron. Así que por una parte me iba para allá un poco a disgusto.

Por otra evidentemente, todo lo contrario ya que tendría la oportunidad de veros a todos de nuevo y compartir con vosotros como lo hicimos.

En definitiva, ha sido maravilloso. No sabéis cuanto he recargado las pilas. Lo he pasado de lujo. No sé, cada una de las tres veces que he estado allá en estos cinco años, cada una ha sido diferente: La primera llegué avasallando un poco al personal con todas las cosas nuevas que estaba viviendo y parecía que se iba a acabar el mundo y no, no se acaba, sigue desmoronándose pero no se acaba. La segunda me lo tomé con más calma, disfruté con todos y el ir con Santi para arriba y para abajo nos relajó bastante a los dos y fue una experiencia muy bonita. Lo que pasa es, que a la semana de estar allá, en estas dos ocasiones, ya tenía el gusanillo por dentro que me pedía volver para acá, pues la vida que llevo aquí y lo que hago, no se como explicarlo, es como un potente imán que me atrae, pero no por su condición de imán sino porque me llena de vida y de paz. Sin embargo, esta última vez ha sido diferente. El gusanillo siempre ha estado, pero esta vez he disfrutado cada momento, cada instante, con cada una de las personas con las que he estado compartiendo estos días, sin prisas, sin agobios, simplemente, disfrutando el momento. El único inconveniente ha sido el no haber podido veros a todos.

Termino mi reflexión, no sin antes daros las gracias a todos por seguir ahí, a los que he visto y a los que no ya que todos, los de allá y los de acá, conformáis mi gran familia. Gracias a mi gente de Sevilla, a mi gente de Algeciras, a mi gente de Madrid, de Segovia, de Barcelona, de Santiago, de Tenerife y gracias también a los que estáis esparcidos por los diferentes rinconcitos del mundo, que aunque a ustedes no os visto tampoco, os llevo dentro de mi. Gracias a mis hermanos, tíos, primos, etc., o sea mi familia consanguínea y unas GRACIAS especiales a mi queridísima madre, LA CARMEN, más conocida últimamente, según me han contado, como Dulcinea. Por ser como es y por llevarlo todo adelante siempre.

Fuera aparte de la reflexión, contaros que por acá toda está ya en marcha. Desde que llegué he estado liado con una cosa o con otra. El vuelo de vuelta, horriblemente cansado y para colmo, cuando llegué a Costa Rica, me cancelaron el vuelo a Tegucigalpa. Miremos  con positividad. Tuve una noche más de vacaciones en un hotel de Costa Rica a costa de la compañía de vuelo jeje.

Cuando llegué, Santi ya estaba manos a la obra con la nueva casa (ampliación de Casa de Todos y futura residencia del que os escribe). Ya casi estamos por el techo. Para Semana Santa con suerte podría estar terminada.

Las clases ya empezaron y aunque la matrícula ha bajado considerablemente, además a nivel nacional, tenemos por ahorita a unos 63 alumnos dispuesto a ir a por todas y nosotros con ellos.

Ahora de martes a jueves, me encuentro colaborando con el Iher (Instituto Hondureño de Educación por Radio), en la edición de los libros para el nuevo bachillerato que suponemos entrará a partir del año que viene. El ambiente acá en la sede central es fabuloso y me encuentro en familia. El resto del fin de semana dando clases en casa.

En fin, que todo va de maravilla. Espero de todo corazón que siga igual y que aunando esfuerzos consigamos seguir aportando nuestro granito de arena para hacer las cosas un poco más fáciles a quienes más lo necesitan.

Bueno creo que no se me escapa nada, si no es así, la próxima os lo cuento.

Recibid todos un beso y un abrazo grandísimo y recordad, como siempre que OS QUIERO Y NO OS OLVIDO.

Publicado en Sin categoría | Deja un comentario

Capítulo 44. Ojalá algún día.

SAM_0139

Quizá, alguien que lea estas palabras pueda decir que soy demasiado romántico, o tal vez que soy un iluso, o podrían también decir que mis pensamientos son utópicos. Incluso podrían no entender lo que quiero decir, que será lo más seguro, ya que hoy estoy un poco «durito» con las palabras. Es posible, pero, me gustaría creer y de hecho lo creo, que habrá un día en que las personas de este mundo puedan mirarse a la cara y abrir totalmente su corazón. Sin miedo, sin pararse si quiera a pensar que el oyente pueda malinterpretar sus palabras, sin miedo a decir las cosas tal y como uno las siente por no dañar al que te escucha. Simplemente decirlo pues el receptor quizá, quizá algún día, también esté escuchando con su corazón abierto y sepa perfectamente que las palabras dichas con el corazón, sean malas o buenas, no tienen que ser dolorosas, no tienen por que serlo, porque son puras.

Me he encontrado ya en demasiadas ocasiones, el caso de que hay personas que no decimos o hacemos tal cosa por el “qué dirán”. Os suena ¿verdad? Pues puede ser que muera antes de ver un cambio a tan gran magnitud, es muy probable, pero sigo soñando con que algún día surja en el corazón de las personas, tal propósito.

Mi situación actual es bastante buena. Me siento a gusto. Sigo pensando que mi camino sigue recto y mis decisiones, me han llevado hasta ahora a buenos términos. Algo receloso por los cambios venideros, pues espero que estos no perturben la paz que reina en mi interior y el camino siga estando despejado. Pero bueno, si por algún motivo el cielo se nubla, chubasquero, paraguas y siempre adelante.

Con las clases me encuentro bastante bien; en ciclo estoy bastante descargado pues entre Dania y Julia me quitan casi todo de encima, aunque ahorita viene mi turno ya que en este segundo semestre entran las mates y la contabilidad así que hay que ir rearmándose.

Con bachillerato es diferente. En general, los chicos se esfuerzan bastante y van entendiendo poco a poco los contenidos. Eso en primero, en segundo súper a gusto. Ahora están haciendo el estudio de mercado y a que no sabéis cual va a ser su microempresa. Santi cuando vino de España, trajo un regalo de mi hermano José Antonio. Un mosaico hecho de azulejo. Tuvimos la idea de enseñarlo a los chicos a ver que les parecía y listo, ya han elaborado las primeras muestras e incluso han tenido su primer encargo pues les pedí que me hicieran uno a mí para una fotografía que mi madre me mando hace unos días en un paquete. (Por cierto se aceptan paquetes eh jejeje). Y por último con tercero, ya mismo empiezan la práctica de empresa y les queda el último tirón teórico. La cosa marcha.

El semillero del huerto ya está sembrado, la milpa (maíz) y los frijoles también, falta que se llene la piscina de tilapia y a vender verduras y pescado.

Por otra parte, como sabéis el 31 fue mi cumpleaños y dos días antes el de Mirna. El jueves 30, hicimos una pequeña celebración conjunta los cuatro: Mirna, Dania, Santi y un servidor. Cocinamos una carnita, hicimos una ensaladilla rusa, tortilla de papas, y a comer culminando con un pastel riquísimo que compró Santi en Tegus.

El sábado día 1 de junio, los alumnos de 1º y 2º de BAE, después de los exámenes que tenían, me hicieron una celebración. Me hicieron partir una piñata como el año pasado y me clavaron la cara en el pastel, una vez más como es costumbre acá. Por su parte los alumnos de 3º de BAE me agarraron por sorpresa el domingo y entre todos trajeron una pizza y unos frescos con los que compartimos un buen rato. Estos últimos, se graduarán este año, así que hay que aprovechar su compañía todo lo que se pueda, ya que aunque dan muchos quebraderos de cabeza, son unos chicos/as, dignos de admiración y se les va a echar de menos. Es el día que tienen para vengarse por mis clases jeje. Fueron unos días sumamente felices, vaya parecía una boda gitana. Lo único que faltaba es la compañía de mi familia y amigos de allá, a los que añoré bastante rememorando algunos cumpleaños celebrados en España. Pero ni modo. En definitiva unos días completitos como veis.

Bueno familia, creo que por hoy ya he divagado bastante. El caso es que me siento bien, que sigo feliz haciendo lo que hago y viviendo lo que vivo. Y que siempre, siempre, seguiremos adelante. Un beso y un abrazo de todo corazón para todos/todas. Recordad que os quiero y no os olvido.

Publicado en Sin categoría | 1 Comentario

Capítulo 43. UN SOPLO DE AIRE EN UN DÍA CUALQUIERA

       Imagen  

          El día empieza a tornarse gris. La oscuridad comienza a inundar el verde que alcanza a vislumbrar mi mirada. Las pupilas se esfuerzan por consumir los últimos rayos de luz, que asoman por la ladera. El día se me antoja corto. Echo un vistazo atrás y me pregunto si he tenido la fuerza de realizar todas las tareas auto encomendadas. Miro hacia adelante y veo todo lo que queda por hacer. Observo un grano de arena, ante la inmensidad de la playa y reconozco mi vida en esa pequeñez. El primer sentimiento es de rabia, de desesperación, de dolor ante la impotencia de no verme capaz de cambiar nada. Pensamientos profundos sobre un mundo tan injusto absorben mis sentidos, agotando las últimas gotas de energía que el día ha querido dejar en mí. La almohada deja escapar los últimos suspiros de una mente agotada.

          Son las cinco de la mañana. La ventana sigue estando oscura, pero se pueden llegar a distinguir, las sombras del forraje del monte. Todavía un rato más.

          Las primeras luces juguetean con las sábanas, mientras que los párpados terminan de despegarse para dejar entrar el resplandor de un nuevo día. Al abrir la puerta, un soplo de aire penetra mi rostro embriagando mis sentidos con un olor mañanero a tierra despierta. El verde sigue ahí. Los colores van dibujando como si de lienzo se tratase, las distintas siluetas del nuevo amanecer.

          La esperanza renace. Tenemos un día más, un día nuevo, un día entero, esperando a que hagamos con él lo que queramos. ¿Qué haremos hoy con él? Sólo me queda pensar, que la playa está llena de esos pequeños granos. De hecho, la misma no existiría si no fuera por la unión de todos ellos.

          Si seguimos abonando la tierra, sembrando pequeñas semillas, algún día alguien podrá comer los frutos que esta nos dé.

 

 

Mi perlita:

 

A través de mi ventana, veo dibujada una cara.

No es un sueño, es mi mirada.

Buscando con ahínco la llegada.

Un nuevo día nacerá,  despejando nubes en mi alma.

Publicado en Sin categoría | Deja un comentario

Capítulo 42. Mensaje navideño.

La nueva familia

Hola familia. En estas fechas tan señaladas, quiero ofreceros el último mensaje del año que se nos va, aprovechando la ocasión para dar la bienvenida al nuevo año que se acerca. ¿Cómo hacerlo? Siento deciros que será diciendo algo que no nos gusta escuchar, recordando lo que somos y en lo que nos hemos convertido.

Recuerdo hace algunos años, cuando nos sentábamos todos a la mesa para almorzar, el típico anuncio en televisión, que tanto nos repugnaba y molestaba a todos. Nos ponían en escena a niños desnutridos del África o a familias en casetas de paja muertos de hambre o comidos por las moscas. Todos decíamos que a ver por qué ponían esas cosas a la hora de comer, incluso muchos cambiábamos de canal. Pero las cosas han cambiado. No se si siguen poniendo esos anuncios pues hace ya tiempo que no veo televisión. Pero también recuerdo que en los últimos años, ya no nos afectaba tanto. Nos limitábamos a mirar el anuncio y a seguir comiendo como si se tratara de un anuncio de coca cola.

Nuestra única preocupación en estas fechas era tener la mesa llena, mirar cuanto habíamos ahorrado para las compras navideñas y exprimir la bolsa a ver si nos daba para un jamón. Ah, eso si, casi se me olvidaba. Una preocupación muy importante era saber cual sería este año el último y el primer anuncio de noche vieja.

También recuerdo otra época, ya casi en el olvido. ¿Os acordáis cuando dar unos buenos días o unas buenas tardes por la escalera al vecino no nos costaba nada? Todavía viven en mí esos recuerdos de puertas abiertas, de celebraciones de cumpleaños conjuntas entre los hijos de los vecinos. De fiestas en la plazoleta del barrio ¿Dónde ha quedado todo aquello? ¿Qué es lo que nos ha hecho cambiar tanto?

Nos decimos cada día que la cosa está fatal, que la crisis nos ha invadido y no nos deja respirar, pero en cuanto tenemos un céntimo de más, lo fundimos en cualquier capricho. Yo mismo con toda esta charlita que os estoy pegando compre ayer unas cervecitas para estos días que pasaré acá con Dania. Nos decimos que es justo pegarnos un caprichito de vez en cuando y verdaderamente creo que si lo es. Pero ocurre algo y creo que es igual de importante mencionarlo ¿Cuándo hemos dejado de darnos esos caprichitos?¿En que momento nos hemos parado a pensar que nos estamos excediendo?¿Algunas vez hemos echado un vistazo a nuestro alrededor y nos hemos dicho; “esta vez el caprichito será para el vecino, que le hace falta”. No, nos limitamos a decir que el dinero nos lo hemos ganado con mucho esfuerzo y me merezco gastármelo en lo que quiera”. Es verdad, es nuestro dinero y puedo hacer con él lo que me plazca.

Sólo quiero invitaros a un último recuerdo. Este es reciente. Hace unos tres años y medio más o menos.

Fue cuando empecé a sentir la necesidad de entregar algo a los demás. Cuando lo sentí verdaderamente. Cuando empecé a hacerlo. No os podéis imaginar la satisfacción, la paz, el amor, el desborde de alegría que comenzó a sentir mi corazón, cuando empecé a deshacerme de todo lo que tenía y empecé a entregarme en cuerpo y alma a los que lo necesitan. Fue algo tan increíble, que absorbió todos mis anteriores pensamientos y filosofías de vida y fue lo que hizo, que hoy siga acá, haciendo lo mismo, cuatro años después.

Sólo deciros, que no hace falta irse a otro país, ni dejarlo todo atrás e irse de misiones para sentirse así de bien. Para sentirlo, nada más tenemos que aportar nuestro granito de arena, solo eso, pues si cada uno aporta el suyo, entre todos formaremos una roca gigantesca, que aplastará a toda esta vida de locura desenfrenada en la que nos encontramos. Dejemos de ser individualistas. Volvamos a hermanarnos. Quizá tuviéramos menos cosas, pero si de algún recuerdo estoy totalmente convencido en este sentido, es de que nuestros corazones eran más libres y estaban más en paz.

Con esto me despido de vosotros hasta el año que viene. Felices Fiestas a todos y recordad siempre que OS QUIERO Y NO OS OLVIDO.

 

Mi perlita:

Días de penumbra nos acechan,

regados de conatos de pobreza y de violencia.

Días oscuros ensombrecen el camino,

aumentando despreocupación e inconsciencia.

En estos días, sólo una esperanza me queda.

Siempre hay luz, para los que la cosechan.

Publicado en Sin categoría | 1 Comentario

CAPÍTULO 41.- LO QUE ENSEÑO, LO QUE OCULTO Y LO QUE SUEÑO.

     Cómo me gustaría sacar todo lo que llevo dentro. No se por qué, pero desde hace ya tiempo, me siento bloqueado. Las palabras, que tan fácilmente fluían de mi alma han dejado, una vez más, de acompañarme. No se. He sentido que hoy podría ser el momento de reencontrarme con ellas.

     La melancolía me invade. Pero no es la misma melancolía que hace un par de años. Realmente creo que a veces las palabras se me esconden, porque me da miedo leer lo que verdaderamente siento. Pues Dios sabe que todo lo que escribo, sale directamente de mi corazón al papel o en este caso, a la pantalla. Quizá hoy, consiga vencer ese miedo.

     Durante toda mi vida, lo que siempre he buscado, lo que me ha hecho palpitar y sentirme grande. Lo quiera o no aceptar, es el reconocimiento de los míos. El sentirme comprendido o, por qué no, admirado por los demás, me ha provisto siempre de esa fuerza para seguir adelante en mi camino. En definitiva, la fórmula de todo esto creo que radica en la mezcla de un poco de inseguridad, una pizca de baja estima, revuelto todo con un poco de vanidad y vanagloria. Resumiendo, un cacao mental de órdago.

     En algunas etapas de mi vida, he conseguido tener una máscara tan buena. He conseguido ocultar tan bien mis verdaderos sentimientos, que algunos no creerán ni una sola palabra de lo que estoy escribiendo. Sólo las personas que han llegado a darse cuenta de esta, mi verdad, los que han llegado realmente a conocerme, entenderán lo costoso que es para mí admitirlo. El caso es, que he intentado toda mi vida desprenderme de todas estas capas del pastel y nunca he llegado a conseguirlo. Hasta ahora he entendido que no eran capas, sino la crema más profunda de la tarta. Quizá ahora que he comprendido esto, consiga mejorar un poco esta incertidumbre interna y ello me haga un poco más libre de lo que ya he logrado ser, que es mucho.

     Lo que creo que me ha pasado durante este tiempo, que tanto me ha costado escribir (a parte de mi haraganería, claro), es que siento que en cierto modo os estoy perdiendo. Me he sentido y siento aún, impotente al no saber reflejaros lo que vivo en esta tierra, lo que siento, lo que pienso, lo que aprendo, lo que logro y lo que pierdo. El tiempo pasa y las caras se olvidan. Esto es así. Cada quién sigue su vida y esto es natural y normal, pero debido a lo que os explicaba antes, quizá para mi se hace un poco más complicado. Quizá por ello no dejo ni un solo instante de pensar en todos vosotros. Quizá por ello, cada mañana, cuando me siento en la puerta de la casa con mi café recién hecho y mi cigarrillo recién liado, observando como cambian los colores del entorno agreste que me rodea y el horizonte majestuoso que se levanta ante mi en las primeras horas del día, no dejan de bombardearme los recuerdos de una vida ya pasada, una vida que he dejado atrás, pero no deja de seguirme. Quizá por ello, aún teniendo todo lo que jamás pude soñar: aún teniendo a mi fiel amigo, aún teniendo a la persona que se convierte cada día más en el amor de mi vida, aún teniendo nuevas metas que alcanzar cada día, aún estando rodeado cada día rodeado de personas y amigos maravillosos, aún haciendo lo que quiero con mi vida y siendo feliz por ello, aún así, quizá por ello, no dejo de sentirme cada día, un poquito sólo.

     Hoy me he puesto música para escribir estas palabras. Hay una carpeta en mi computadora que se titula “Flamenquito y algo más”. Cada canción de El Barrio, Navajita Plateá, El Bicho, Melendi, El Canto del Loco, Malú, Hanna y no se cuantos más, me transportan a momentos inolvidables de mi vida que han calado tan intensamente en mi alma, que ya nunca podré, ni querré borrarlas pues, forman parte de mi ser.

     Lo que pienso es que, como os digo, estos fragmentos de mi vida forman parte integra de lo que soy hoy, de lo que siento hoy. Parece una tontera pero hoy me siento más yo que nunca, más Sergio que nunca, más andaluz que nunca, más sencillo que nunca, más alegre que nunca, más vuestro que nunca y sin embargo, más lejos de todo lo que dejé atrás, que nunca.

     El caso es, que como podéis apreciar, siento y pienso que aunque lo tengo “todo”, siempre falta algo. Y ese algo, aunque quizá nunca lo encuentre, es lo que sigo y seguiré eternamente buscando. “Buscando un Sueño”. Recordad: “OS QUIERO Y NO OS OLVIDO”.

Mi perlita:

Dejo espacios en mi interior,

a merced del viento.

Busco con ahínco lo profundo de mí ser

y guardo lo que siento.

Dejo riendas sueltas a lo vivido,

en busca siempre, de un nuevo camino.

Espero algún día encontrar,

tan solo el aliento, de mi destino.

Publicado en Sin categoría | 2 comentarios

Capítulo 40. Ya van 40, casi 4 años.

 

Hola familia.

Se que os tengo un poco abandonados, pero las circunstancias que me rodean hoy día, así lo requieren. Al no haber conexión en la casa y no tener dinero para que la haya, no me conecto casi para nada y llevo más de un mes sin saber nada de vosotros. Intentaré en la medida de lo posible, ir contestando los correos que me mandáis. Pero quiero que sepáis que aun así, aun no siguiendo desde la distancia vuestras vidas, no os quito de mis pensamientos ni un solo instante.

Dicho esto, ahí va el capítulo de hoy.

Ya voy en un camino acelerado, hacia los cuatro años de estancia acá en estas tierras de Honduras. Ni que decir tiene que en todo este tiempo me ha pasado de todo. Que he visto cosas para mi inimaginables, que he pasado por situaciones nunca previstas en mi vida, que he vivido verdaderas aventuras de película, que he conocido a cientos de personas súper interesantes y otros cientos que no lo son tanto. En fin que he vivido plenamente y al cien por cien, cada segundo que se me ha otorgado.

A veces me detengo, dejo de caminar y miro a mí alrededor. Hecho un vistazo,  reviso con ahínco el camino recorrido en busca de los errores cometidos en el mismo. Intento por todos los medios, que cada nuevo paso que doy, sea la consecuencia de un profundo estudio de lo que estoy haciendo y para qué lo estoy haciendo. Aun así, siguen existiendo esos días, en los que uno no encuentra respuestas a sus preguntas. Sólo queda entonces, atarse bien lo zapatos y seguir adelante, abriendo las puertas que a uno se le van presentando en el camino y entrando en las que a uno le dicta su corazón. Cómo siempre, la frase que se hizo un día mi compañera inseparable, sigue surgiendo en los días de oscuridad; “Sigue adelante” y yo, sigo adelante.

Cada día siento la necesidad en mi interior, de entregar más de lo que doy. Es como una droga ya. He descubierto que haciéndolo me siento completo y no puedo ya dejar de hacerlo. No creáis que no me asaltan dudas de vez en cuando. Que el yo egoísta sale a relucir reclamando lo que el cree suyo, en cuyas peticiones caigo además una vez que otra. Pero el camino es tan claro una vez que has empezado a caminarlo, que es muy difícil salirse de él.

Pasando a otro tema, os doy las gracias de todo corazón a todos los que me habéis felicitado el cumple y os diré que fue un día de los que nunca se olvidan. Los alumnos todos, organizaron una celebración sorpresa, de lo más completita. Hasta me hicieron golpear una piñata je je. Ya veréis las fotos, no tienen desperdicio. Encontraréis también fotos del día de la madre que celebramos acá en la casa con la mamá de Dania, con la que por cierto me va todo de maravilla. Del curso de siembra que le dimos a los cipotes de ciclo. De mi celebración de cumple conjunta con Mirna, la futura esposa de Santi, las del cumple de Santi en el que también hubo fiesta y celebración con los alumnos y muchas más que seguro disfrutaréis. Por cierto no se si sale alguna de mi nuevo aspecto jeje, me he cortado la coleta, jejeje. Si no la hay tendréis que esperar al siguiente blog.

No os pido que me comprendáis, aunque sería un verdadero placer que lo hicierais, no os pido que me toméis como ejemplo, pues no soy ejemplo de nada ni de nadie. Lo único que os pido y os pediré siempre, es que sigáis ahí como hasta ahora habéis estado. Que no os canséis de escuchar a este pobre iluso, que lo único que pretende es encontrar sus sueños y ayudar a que otros encuentren los suyos. Y no olvidéis nunca que OS QUIERO Y NO OS OLVIDO.

 

 

Mi perlita (reflexión):

Nunca pude imaginar, ni por un solo instante,

lo que me deparaba el futuro. Hoy os puedo decir, que me

alegro de haber vivido cada segundo de mi vida, porque cada

uno de ellos, me han traído al día que vivo hoy.

Espero con paciencia y dedicación plena, los segundos

que me quieran traer mañana. 

 

Publicado en Sin categoría | 1 Comentario

CAPÍTULO 39.POR FIN EN CASA.

Pese a todos los cambios sufridos en este corto periodo de tiempo. Siento que la vida me sonríe. Y aunque desde que llegué a Honduras he pasado por muchas etapas, he sentido firmemente en cada una de ellas, que todos mis sentidos han ido creciendo a paso agigantado, siempre al mismo tiempo pensando y sabiendo que me queda todo un abismo por descubrir y aprender. Mil y una vez son las que me he preguntado, ¿que sería de mi vida?, ¿que me depararía el futuro? Y mi corazón ha ido dando tumbos, de un lado a otro, buscando mil respuestas a mil preguntas, las cuales únicamente me han llegado, cuando he dejado de preguntármelas.

He llegado ha muchas conclusiones desde que estoy acá y a muchas certezas en cuestiones puramente de lo que para mi es la vida, de en que se ha convertido para mí, prioridad absoluta, y en cuales son los ideales más nobles por los que una persona puede y debe luchar. Sin embargo, me sigo encogiendo, como si fuera un niño al ver una peli de terror, ante los problemas más nimios del ser humano los más insignificantes que a su vez son los que traen más dolores de cabeza. En fin, lo somos todo y no somos nada.

El caso es que poco a poco, me voy sintiendo de nuevo, pletórico en lo que a emociones se refiere. Estamos pasando unos apuros económicos tremendos. Estamos viviendo como protagonistas de una peli del oeste. Me estoy encontrando con un sinfín de problemas a diario con las clases, con la casa y con el dinero, sobre todo con el dinero, cuando me siento impotente al no poder dar un mejor servicio a nuestros alumnos, o a nuestros vecinos por no tener los recursos suficientes. Me devano el cerebro día si y día también por encontrar soluciones de autofinanciamiento para el sostenimiento del proyecto. Todo problemas y más problemas. Pero, ¿sabéis qué? Aún con todas estas sensaciones recorriendo mi cuerpo, y mil sensaciones más que os podría contar pero ya os aburriría demasiado. A pesar de todos estos pesares. Siento una felicidad interior difícil de describir. Estoy donde quiero, haciendo lo que quiero, soy feliz haciendo felices a otros, tengo una pareja que cada día que pasa me da más vida, vivo en mi casa (sí, de adobe y a medio terminar, pero mi casa), estoy todo el día en pleno contacto con la naturaleza (aunque eso signifique tener que lidiar alguna que otra vez con bichejos peligrosos), pero Dios mío, ¿qué más le puedo yo pedir a la vida? Soy un privilegiado. Aunque algunos penséis que:” hay que ver como está viviendo, que falta le hará a él vivir de esa forma, etc, etc.” Cada segundo que pasa en mi vida, me siento más seguro de cada paso que he dado en los últimos tres años y medio.

Sólo sentía la necesidad en esta ocasión, de compartir con vosotros lo que llevo dentro. Y esto es lo que acabo de hacer (veis como hago lo que quiero je je). Bueno familia, como siempre os digo y sin cansarme nunca de hacerlo: OS QUIERO Y NO OS OLVIDO. MIL GRACIAS POR SEGUIR AHÍ. Y MIL GRACIAS MÁS POR VUESTRO APOYO.

 

Mi perlita:

Ardo en deseos de pedir,

un granito de azúcar.

Ardo en deseos de sentir,

de tus labios la dulzura.

Siento dentro de mí ser,

tu mirada, tu locura.

Pienso cada día en saber,

más de ti, más de mí,

basta de amarguras.

Publicado en Sin categoría | Deja un comentario

CAPÍTULO 38. Lo que el viento se llevó y lo que trajo.

     

         No, no voy a poner a Dios por testigo de no volver a pasar hambre ni nada por el estilo. Con este título lo único que quiero reseñar, es que en nuestras vidas empieza una nueva etapa. Una etapa que promete un cúmulo de nuevas aventuras y retos que a primera vista, asustan. Por una parte, las clases, que este año se han duplicado y estamos inmersos en todas las anécdotas que tenemos a diario con nuestros chicos, que por cierto, son geniales. Por otro lado la obra, con la que estamos pasando unos apuros tremendos ya que, como siempre pasa en estos casos, el dinero nos falta y aún no terminamos. Pesares, sufrimiento e incluso a veces, agonía. Mucho sudor mental como lo llamo yo, es el que estamos volcando en esta construcción, que por otra parte, nos hará vivirla aún con mayor ilusión, compromiso y entereza.

        En otro estado de cosas entra, evidentemente, lo sentimental. Por un lado con Santi, este año estamos haciendo muchas más cosas por separado, repartiéndonos el trabajo ya que de otra forma no sería posible llevarlo todo. Curiosamente, esto nos está uniendo mucho más de lo que ya lo estábamos. Así que ambiente perfecto e ilusión por las nubes.

        Por otra parte, en el estado más personal, tengo una noticia bomba y es que ha entrado alguien en mi vida. Una mujer, que poco a poco me está haciendo sentir cosas, ya tiempo atrás olvidadas y que reúne todas las cualidades, las pocas que pido y muchas más, necesarias para mantener una relación en toda regla.

        En fin, que con tantas puertas abiertas hoy en mi vida, cuanto menos, mi corazón se está aireando je je.

        Sabéis eso que le pasa a uno, cuanto tiene cientos de sentimientos dentro bombardeando al mismo tiempo. Nos han pasado tantas cosas en tan poco tiempo, vivimos tan intensamente. Es difícil plasmar en unas pocas líneas todas las sensaciones del día a día. Sólo puedo decir, que la vida es maravillosa y aunque esto suene muy cursi, cada día que me levanto es como estar a la espera de cuantas de esas maravillas van a ocurrirme ese día. Son muchos los retos, las preocupaciones, los malos ratos, la desesperación, que vivimos acá todos los días, pero… “Quiero más”, pues todo lo positivo, las risas, la alegría, la paz interior, la esperanza, que encierran esos momentos, hacen que merezca la pena, vivir cada segundo de ellos.

Familia, OS QUIERO Y NO OS OLVIDO. OS AMO CON TODA MI ALMA. GRACIAS UNA VEZ MÁS POR SEGUIR AHÍ.

 

Mi perlita:

Nuevas fronteras se abren en el horizonte.

Nuevos caminos, nuevos miedos que se esconden.

Mi mirada al cielo, una vez más.

Escudriñando los vientos,

buscando, mi verdad.

Publicado en Sin categoría | Deja un comentario

CAPÍTULO 37. GRACIAS.

Hola familia, ya estoy de nuevo con vosotros.

Como os hemos explicado, este ahora será mi rinconcito en el blog, para explicaros mis más profundos sentimientos y sensaciones en la vida que comparto acá, en Honduras con tantas y tantas personas a las que quiero de todo corazón. Ahí va mi primera reflexión del nuevo año.

Como habréis notado, esta vuelta a España ha sido bien diferente a la anterior. He encontrado en mí, una serenidad y una paz interior que me ha permitido disfrutar cada segundo que he pasado con vosotros, que es lo que realmente pretendía con este viaje. Os doy nuevamente las gracias, por todos los buenos ratos que me habéis hecho pasar en este mes ya que estos, me han dado una energía que me servirá para seguir adelante en mí camino. Este camino, que tanto me llena, a pesar de todas las dificultas que tiene el caminarlo. Gracias, mil gracias de todo corazón.

En estos dos últimos meses he tomado una serie de decisiones, que indudablemente cambiarán nuevamente mi forma de ver las cosas y me he dado cuenta de algo muy importante. Quizá estas decisiones, sean las primeras que he tomado en mi vida, sin partir de un puntito de egoísmo. Esto es así, ya que en cada uno de los momentos en que uno elige, quizás dándose cuenta, quizás inconscientemente, ponemos siempre por delante nuestro bienestar y tranquilidad, aun sabiendo que sería mejor hacer las cosas de otra forma, pero al ser un poquito más complicado lo dejamos pasar. En definitiva, estas decisiones aun habiendo alguna dolorosa, me han hecho aun más libre de lo que ya era y se, que es lo mejor.

Sigo adelante, sigo buscando, sigo viviendo, sigo cambiando. Os quiero de todo corazón, os amo incondicionalmente y nunca, nunca, os echaré en el olvido. GRACIAS.

 

Mi perlita:

Dibujo formas en el cielo.

Vivo soñando despierto.

Duele dar ciertos pasos,

más no es bueno sentir miedo.

Vivir soñando, vivir haciendo.

Vivir, “Buscando un Sueño” 

Publicado en Sin categoría | 1 Comentario